El trefilado consiste en el estirado del alambre en frío por pasos sucesivos a través de hileras, dados, mandriles o trefilas de carburo de tungsteno, cuyo diámetro es paulatinamente menor.
Esta disminución de sección da al material una cierta aspereza en beneficio de sus características mecánicas, las máquinas utilizadas para realizar este proceso se denominan trefiladoras en ellas se hace pasar el alambre a través de las hileras.
Para lograrlo, el alambre se enrolla en unos tambores o bobinas de tracción que fuerzan el paso del alambre por las hileras. Estas hileras se refrigeran mediante agua/soluble y las bobinas o tambores de tracción se refrigeran normalmente con agua y aire.
El fluido utilizado para el enfriamiento de cable de metal es una mezcla de agua con grasa o también denominado soluble, el cual se rocía sobre las líneas de los diferentes diámetros del cable para enfriarlo, este fluido cae a un depósito donde se bombea a un intercambiador de calor para enfriarlo y nuevamente introducirlo al proceso de enfriamiento.
Mediante este proceso se producen diferentes diámetros de los cables metálicos para las distintas operaciones y procesos industriales, así como domésticos, instalaciones eléctricas, embobinados de motores y cables de alta, mediana y baja tensión.
Mantener el sistema de enfriamiento adecuado es el reto principal, ya que al tener temperaturas elevadas en el soluble la máquina para prevenir desgastes o quemaduras en el material, lo cual merma la calidad del producto e interfiere con los tiempos de producción.
Te ayudamos a seleccionar el intercambiador de calor de placas adecuado para tu máquina trefiladora así como el equipo de bombeo que pueda cumplir con las especificaciones y demanda de producción en tu planta.